Amada Mendívil, nació en Puebla el 4 de Octubre de 1866, su padre fué Don Noriega de  Benítez que se hizo cargo de su educación, en la que puso singular cuidado pues además de sus estudios  tocaba muy bien el piano llegando a ejecutar en compañía de su hermano Rafael Mendívil en  conciertos a beneficio de Obras Sociales.

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Bordaba admirablemente en blanco y en colores. Siendo todavía de pocos años su Padre,  contrajo segundas nupcias con la santa y hermosa Señora Delfina Landa en quién encontró una  segunda madre en todos los sentidos y la hizo una ama de casa que no dejó nada que desear y  preparó una santa esposa y tierna madre de familia.

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En 1892 contrajo matrimonio con un joven de las mejores familias de México: Eduardo Gutiérrez  Palacios, su padre Don Bonifacio Gutiérrez sirvió en distintas épocas al Gobierno de la República  Mexicana. 

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Como su esposo era pobre pues trabajaba como empleado lo ayudó en todo haciéndole feliz la  vida conyugal durante 53 años, en los que a pesar de su carácter fuerte de él, nunca tuvieron ninguna dificultad gracias a su tino y talento para gobernar su casa y educar a sus hijos. Era muy prudente y  cariñosa pero al mismo tiempo enérgica y de una virtud que todos elogiaban pues a pesar de que ella  la disimulaba todos se daban cuenta. Era muy hermosa y al mismo tiempo muy sencilla pues solo  estaba dedicada a la felicidad de su esposo y sus hijos.

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El actual Colegio Amada Mendívil, recibe dicho nombre en virtud de Amada Mendívil,  como la imagen de una persona que ayudaba a todo el que no sabía leer, pues tenía  bastantes estudios y un gran acervo Pedagógico